En su segundo día de actividades en la ciudad del Cusco, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Angel Fernando Yldefonso Narro, realizó una visita de trabajo al Centro Juvenil Marcavalle de esta localidad, con el objetivo de verificar personalmente las medidas socioeducativas que se implementan en beneficio de los adolescentes en conflicto con la ley penal.
Durante la supervisión, afirmó que se continuará redoblando esfuerzos para que los jóvenes que cometieron algún error en sus vidas, puedan en el futuro dedicarse a hacer el bien, para satisfacción propia, de sus padres y de sus familias.
En el caso del centro juvenil Marcavalle, dijo que se tienen que potenciar los talleres de producción de calzado para alcanzar los niveles que tuvieron en el pasado, cuando producían a gran escala, lo que permitirá a los adolescentes generar ingresos y también contar con una opción laboral para cuando egresen.
Asimismo, comentó que se evaluará la factibilidad de suscribir convenios para que puedan vender sus productos a las instituciones del propio Estado.
El centro Marcavalle alberga a 123 adolescentes en conflicto con la ley penal, quienes desarrollan actividades todas semanas en los talleres de música y danza, carpintería, cuero, calzado y tejido, entre otros.
También reciben orientación psicológica en la parte emocional y familiar, en materia de fortalecimiento de valores humanos, empatía y buen comportamiento. Este lunes inicia el año escolar, en tanto un grupo de adolescentes estudia de manera virtual las especialidades de enfermería, turismo e inglés.
Luego, continuando con su agenda de trabajo, el ministro se reunió con el decano del Colegio de Abogados de Cusco y presidente de la Junta de Decanos de los Colegios de Abogados del Perú, Myke Pilares. Dialogaron sobre la problemática en torno a la correcta administración de justicia y el papel que corresponde a los abogados en esta materia.